Israel redobla los ataques en Gaza pese a la petición de Blinken de reducir los daños a civiles | Internacional

Lo pidió el martes en Tel Aviv frente al primer ministro Benjamín Netanyahu, y lo ha reiterado este miércoles en Ramala, capital administrativa de la autoridad palestina, ante el presidente palestino, Mahmud Abbas. El jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Antony Blinken, reclama a Israel que reduzca los daños a los civiles en sus ataques en la franja de Gaza, al tiempo que pide que se agilice la entrada de ayuda humanitaria para una población desesperada después de tres meses de bombardeos. Las tropas israelíes, sin embargo, han redoblado las operaciones en el centro y el sur del enclave costero, a pesar de que el Ministerio de Defensa anunció la semana pasada una nueva fase enfocada en objetivos estratégicos y sin ataques masivos.

Después de haber declarado desmantelada la estructura militar de Hamás en el norte, las Fuerzas Armadas están concentrando los ataques en Maghazi (centro de la Franja) y en Jan Yunis (sur), donde este miércoles bombardearon intensamente más de 150 objetivos y descubrieron 15 túneles de la milicia islamista de Gaza, con un balance de unos 150 muertos contabilizados al mediodía. Cerca del 90% de los 2,3 millones de habitantes del territorio se han visto desplazados por la guerra y se hacinan en condiciones inhumanas en la parte más meridional. El ejército ha lanzado octavillas para que la población del centro evacue la zona en dirección a Rafah, en la frontera egipcia.

En esa misma zona perdieron la vida en un bombardeo 15 miembros del clan Nofal. Según ha comprobado la agencia Reuters en la morgue de un hospital, la mayoría de los cuerpos envueltos en sudarios eran de niños. La Organización Mundial de la Salud (OMS) se ha visto obligada a suspender su séptima misión de ayuda a Gaza desde hace tres semanas. “Los obstáculos para transportarla son casi insuperables”, advirtieron los responsables de la agencia de la ONU. “La gente hace cola durante horas para conseguir un poco de agua, que ni siquiera es potable, o de pan”, lamentaba el director general de la OMS, Tedros Ghebreyesus, quien recordó que solo funcionan parcialmente una docena de centros sanitarios.

Blinken defendió también en Ramala la creación de un Estado palestino, pero su demanda de constitución de un gabinete de tecnócratas, sin presencia de dirigentes políticos, no tuvo eco en el rais Abbas, quien se niega a aprobar un cambio de gobierno mientras continúe la guerra de Gaza. EE UU pretende que una Autoridad Nacional Palestina (ANP) reformada se haga cargo de la Franja tras el fin del conflicto. Israel solo propone una administración limitada palestina, dependiente de las alcaldías de barrio y los patriarcas de los clanes. El secretario de Estado también reclamó al Gobierno israelí la transferencia al Ejecutivo de Ramala de los tributos que Israel recauda en su nombre y que mantienen bloqueados desde el estallido de la contienda el pasado 7 de octubre. Blinken ha asegurado, además, que Israel ha aceptado que una “misión de evaluación de la ONU” visite el norte de la Franja para preparar el retorno de la población desplazada por la guerra, según informa la agencia France Presse.

Ataque israelí sobre Jan Yunis, en la franja de Gaza, este miércoles.
Ataque israelí sobre Jan Yunis, en la franja de Gaza, este miércoles. HAITHAM IMAD (EFE)

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Mahmud Abbas, de 88 años y en el poder a partir de 2005 sin haberse sometido a elecciones presidenciales desde entonces, mostró ante Blinken su inquietud por el desplazamiento forzoso de la población palestina y el riesgo de separación de los dos territorios palestinos en un futuro Estado, en el que Gaza, que ha estado controlada en exclusiva por Hamás desde hace 17 años, resulta “esencial”. También reclamó una conferencia internacional de paz que ponga fin a la ocupación israelí de los territorios palestinos, incluido Jerusalén Este.

“El presidente no permitirá que se desplace al pueblo palestino de la franja de Gaza, Cisjordania y Jerusalén”, citó sus palabras la agencia oficial Wafa ante las declaraciones de miembros del Gobierno israelí, “que buscan la expulsión del pueblo palestino de su tierra”. El jefe de la diplomacia estadounidense ha proseguido este miércoles su gira por Oriente Próximo en dirección a Baréin y Egipto, en su intento de contener la expansión de la guerra de Gaza por el norte, en la frontera de Líbano y por el sur, en la estratégica vía comercial del mar Rojo. En su escala en Manama, capital de Baréin, Blinken declaró que Abbas está “comprometido” con la reforma de la ANP para “asumir la responsabilidad en Gaza” y unificarla con Cisjordania.

Ataque masivo de los hutíes en el mar Rojo

Las Fuerzas Armadas de Estados Unidos aseguraron en la madrugada del miércoles que habían derribado una veintena de drones y tres misiles en un ataque masivo lanzado por los rebeldes yemeníes hutíes contra naves mercantes en el mar Rojo, según informó la agencia Efe. El Pentágono ha indicado que los aparatos fueron lanzados desde áreas de Yemen controladas por los rebeldes hacia rutas marítimas internacionales, sin que se registraran heridos ni daños. El secretario de Estado de Defensa del Reino Unido, Grant Shapps, ha asegurado que el ataque de los hutíes ha sido “el mayor en décadas”.

En el frente del norte, Israel se atribuyó la muerte en un ataque aéreo del Ali Husein Barj, comandante de la unidad de drones de la milicia proiraní de Hezbolá en el sur de Líbano, según informó el portavoz jefe de las Fuerzas Armadas, contraalmirante Daniel Hagari. Y en Cisjordania, mientras tanto, el ejército israelí admitió este miércoles que uno de sus vehículos había atropellado “involuntariamente” el cadáver de un palestino durante enfrentamientos armados en Tulkarem, en la línea divisoria noroccidental con Israel, informa AFP, según muestra un vídeo ampliamente difundido en las redes sociales. Las imágenes muestran un vehículo militar que se detiene ante un cuerpo que yacía en el suelo antes de arrancar de nuevo y arrollarle con sus ruedas. El ejército israelí emprende con frecuencia operaciones en Cisjordania, territorio ocupado por Israel desde 1967. Desde el inicio de la guerra en Gaza, la violencia se ha disparado hasta cotas no conocidas desde la Segunda Intifada (2000-2005).

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By Alberto Ramos

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